¡Nos hemos mudado a www.miladonintendo.cl! Serás redirigido al artículo en 5 segundos, pero si no quieres esperar, haz clic aquí para ir de inmediato :)
HACE bastante tiempo, digamos un par de meses, mi primo Sebastián -de cinco años- me pidió jugar con él un rato. Pero como ese día yo no podía, le dije que el viernes de esa semana
iríamos a mi casa a jugar. Él quedó
muy contento y esperando que llegara el día viernes. "¿A qué jugaremos? ¿
Cuándo es viernes?". Esas son algunas de las preguntas que me hizo. La primera fue fácil de contestar: íbamos a
cazar patos en el televisor (hace un tiempo ya habíamos jugado a eso y quedó fascinado... vamos, el niño tiene
cinco años no más, se impresiona fácilmente). La segunda... le dije que era
pasado mañana, pero él aún no tenía claro conceptos como "ayer" o "mañana", así que, después de tratar de explicarle en vano, simplemente le dije que sería viernes en dos días más. Con eso
quedó conforme.
El viernes por la tarde, después de volver de la universidad y de almorzar, fui a casa de mi tía a buscar a mi primo. Así que me lo llevé. Al llegar a mi casa, me preguntó de nuevo
qué íbamos a jugar, y le volví a decir que cazaríamos patos. Sin embargo, cuando comenzamos a jugar, se aburrió pronto
porque no le achuntaba a nada, así que me preguntó si tenía otros juegos. Con eso le mostré otro de pistolas que tengo, que es más fácil que el
Duck Hunt. Me refiero al
Wild Gunman.
Y ahí sí que quedó loco.